8 pensamientos en “A Heart in New York…

    • Más que comer es el acto de ser reclamado por alguien. Así lo entiendo yo. De todos modos, estar sentado en unas escaleras una noche de verano neoyorquina, comiendo un sandwich mientras la vida pasa delante de ti, no me parece un mal plan alternativo…

  1. Quizás eso mismo quiso representar Buñuel en el «Angel Exterminador», Emilio.
    Pero yo soy más bién de las de poner mesa grande y aguar la sopa antes de dejar que alguien coma solo.
    Porque hay tortura mayor y más cruel que la de no poder hablar mientras se está comiendo?

    • Como le he dicho a Emilio, interpreto que los dibujos hacen referencia a lo hermoso que es el que alguien te reclame. Comer solo no deja de ser un acto triste, un acto reflejo. Siempre recuerdo a Luis Antonio de Villena cuando decía que al comer en un restaurante solía pedir que le sentasen en una mesa esquina para no tener que ver a los demás. Incluso pedía que le colocasen un biombo que le segase del resto. Para gustos…

  2. Esto me ha recordado los relatos de Navidad que publicasteis en tu blog.No comente nada porque después de leerlos pensé que cualquier cosa que pusiera iba a desmerecer mucho.Me gustaron.
    Saludos

    • Sí, también yo interpreto que todos los cuentos son fruto de la soledad, puntual desolación y no poca saludable nostalgia controlada. Supongo que así deben son los relatos navideños.

      Muy agradecido te estoy por tus halagos, Oli. En nombre de mis compañeros de viaje te lo agradezco. Soy consciente de que mis relatos son el punto débil de nuestro triunvirato navideño. Aun así, te confieso que en estos cinco años he recibido algunos correos interesandose y felicitándonos por los cuentos. De algún modo esta pequeña tradición ha servido para algo.

      Saludos, Oli.

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