Era niño cuando pasaron, una tarde de sábado, «Planeta Prohibido» por televisión. Quedé fascinado por aquella maravilla, por los minivestidos de Anne Francis y por un robol llamado Robby que decía hablar tropecientas mil lenguas diferentes.
Poco después me reencontré con su protagonista en «Aterriza como puedas». Aquel tipo apuesto había intercambiado su cara por la de un hombre de mediana edad con rictus de haber pagado las facturas de todos los simpas del mundo. Daba la sensación de ser tan ingenuo, con su cara de chiste a cuestas, que nunca pudo escapar de aquella telaraña que los ZAZ tejieron en torno a él.
Después llegó la gloriosa trilogía de «Atrapalo como puedas» (que horror de título) y obtuvo la fama que nunca había tenido a costa de unos dados marcados que le llevaron a interpretar perennemente el mismo papel en infumables secuelas no confesas del cine que le convirtió en icono.
Le vi hace poco en una entrevista con Buenafuente. Penosa entrevista lastrada por la barrera idiomática y por las secuelas de la edad ya patentes. Venía a promocionar su inevitable encuentro con Chiquito de la Calzada. Otro freak, y orgulloso de serlo, que se ríe con los chistes de pedos.
La mejor mueca que me queda este año será para él…
Me he enterado por el telediario de su pérdida.La última vez que lo vi por la tele fué con Buenafuente y estaba muy mayor.
El mejor recuerdo que me queda es el de «Aterriza como puedas» que no sé la de veces que la he visto y siempre ha conseguido hacerme reír.
Bsets
Lamento mucho su pérdida, si bien tuvo una vida larga y bien vivida. Un tipo que acompañó mi infancia, mi adolescencia y mi aterrizaje en el mundo adulto con sus muecas y su cara de no saber por dónde le da el aire. Un icono para mí.
Besos, Troyana.
No es Jack Lemmon, pero me ha hecho reír mucho. Ha sido hoy un día gris en todo. Incluso en esto.
No, no ha sido un buen día en ningún aspecto. Pero siempre lo mejor está por llegar. En el caso de Nielsen, lo mejor ya está dicho. Para quien desee su compañía durante un par de horas ahí quedan sus películas.
Ayer, lunes, el lunes fue un poco más lunes…
Ayer fue uno de esos días rojos que de vez en cuando aparecían en el horizonte de Holly Golightly…