Georgie Bush Jr. es un tipo gracioso. Lo demostró en aquel debate presidencial en el que Al Gore se empeñó en defender la administración democrata con datos. Números, números, demasiado esfuerzo para una mente limitada como la suya. Por esa razón echó mano de una de las frecuentes meteduras de pata del vicepresidente saliente cuando afirmó haber sido el inventor de Internet. Miró a la cámara muy serio y dijo: «Este tipo debe haber inventando también la calculadora». Desde ese momento, el votante medio norteamericano tenía un ganador. La importancia de que Obama haya ganado unas elecciones no radica en el color de su piel sino en la esperanza que otorga el que una sociedad tan conservadora como la americana haya elegido el camino de los ideales y la esperanza ante las planas actitudes populacheras como las del campechano Georgie.
Bush Jr, sencillamente nefasto, limitado por una capacidad intelectual cercana al encefalograma plano, no gobernó los States, como muchos aseguran. Se limitó a estar mientras otros movían los hilos. Firmó decretos mientras otras manos guiaban sus manos; cargó con los errores que otros cometían en la sombra. Fue el hombre de paja perfecto.
De sus limitadas entendederas se podrían escribir miles de tomos de libros que él jamás leería. Sus detractores (infinidad y más) le descalificaron e insultaron (fui testigo de cómo un popular periodista catalán le calificaba de «hijo de puta» en su programa) sin que nadie fuese consciente de que su debilidad metal serviría para eximirle de cualquier responsabilidad directa. Sencillamente es bobo, y no utilizo el término en modo alguno peyorativo, me limito a reflejar un hecho.
Una prueba más de su debilidad mental la dio hace pocas semanas en Haití. Viajó hasta la isla caribeña, acompañado de Bill Clinton, para comprobar la situación in situ. Osease, y hablando de políticos, para hacerse la foto. Fue entonces cuando un haitiano le estrechó la mano. Su asqueado gesto, que culminó con una limpieza improvisada en la espalda de Bill, fue recogido por una cámara. ¿Por qué coño siempre hay una cámara en todas partes?
Mejor que hablen las imágenes…
Sin palabras me he quedado al ver el vídeo.Bush es un personaje que pasará a la historia por todos los motivos que expones,de todas sus apariciones,yo me quedo con la que mostró su reacción al enterarse de que la Nación más poderosa del mundo estaba siendo atacada por unos terroristas,el negro 11-S.Su cara de pez en la guardería,mientras leían los niños un cuento,es todo un poema.
bss
Intelectualmente está a la altura de una ameba. Humanamente posiblemente esté por debajo. Aquel momento que citas, Troyana, dibujó el perfil del hombre que realmente es para los que siempre prefieren mirar hacia otro lado. Peor aún fue su actuación (o falta de ella) durante la destrucción de Nueva Orleans a causa del huracán Katrina. La nulidad del gobierno federal fue tan vergonzosa que incluso el alcalde de la ciudad terminó llorando ante las cámaras de pura impotencia.
Besos.
Al Gore suele hacer una broma en algunas de sus conferencias. Yo soy el presidente de los EE UU que nunca gobernó. Y volviendo al pasado esto dijo Al Gore cuando tuvo que renunciar a la presidencia «for the sake of our unity as a people and the strength of our democracy, I offer my concession.» El resto de la historia ya la conocemos.
Juzgando las consecuencias sobre todo cuanto ocurrió tras aquellas nefastas elecciones, lo mejor nunca debió ser pasarlo por alto. Gore no debió tirar la toalla, si bien es cierto que se enfrentaba a presiones muy poderosas. Probablemente habría sido un mal presidente, tal vez, pero seguro que no habría alcanzado ni de lejos el nivel de incompetencia de Bush.